sábado, 30 de noviembre de 2013

Sopa de pollo para el alma

Igual que a la persona resfriada o enferma se le solía dar sopa de pollo para confortarla y reanimarla, este libro pretende ser sopa de pollo para el espíritu.
Son un conjunto de historias muy cortas, algunas rozando lo melodramático, con un mensaje positivo, que ayudan a reflexionar. Cumple su función de animar y motivar. Es muy recomendable para todo el mundo pues nos ofrece la perspectiva que a menudo perdemos sobre la vida.

La felicidad amarga, de Pablo Martín Carbajal

Ahora no estoy leyendo mucho por estar enfrascado en otras ocupaciones, pero esta novela de un amigo ha supuesto un paréntesis por dos razones: su brevedad y que tenía que presentarla junto al autor en Tagle.
El título ya anticipa el leitmotiv de la historia. Es casi un oxímoron y, como aclaró Pablo en la presentación, "amarga" se utiliza en esta ocasión como adjetivo, no como verbo.
Tenemos una novela intimista, emotiva y reflexiva que todo aquel que la lea podrá reconocerse, al menos los que compartimos generación. Habla de viajes, pero sobre todo de regresos, físicos y en el tiempo.
Son ocho capítulos como ocho relatos, pero unidos por un hilo conductor. El conjunto transmite la sensación de que nos hacemos una pregunta: ¿Quiénes somos?
Aunque es sencilla de leer no deja de ser densa. Toca unos puntos fundamentales como son la Amistad, la figura del Padre, la química entre hermanos, la Familia, el Tiempo...
Técnicamente lo toca casi todo: motivos literarios, ruptura de linealidad, vasos comunicantes, repetitio... ¡incluso utiliza los narradores en las tres formas: primera, segunda y tercera persona
Ha creado una serie de personajes, algunos partiendo de personas reales, que tienen un encanto y fuerza particular. La abuela que graba sus historias en cintas de casette, el abuelo Clodo, Jesús y su trágico final, Dani... Tan sólo Carmen, la vecina del 6º que parece conocer a Rafa -el protagonista- mejor que él mismo, queda algo olvidada. Fue ella la que le regaló las matrioskas...
Hay guiños a su anterior novela, La ciudad de las miradas, al compartir algunos personajes.
En fin, una novela breve aunque rica, de las que sentimos cercanas y cuyo dramático final supone un acto de valentía.

martes, 5 de noviembre de 2013

Cosas no aburridas para ser la mar de feliz, de Mr. Wonderful

 
¿Cómo describir este libro? No me gusta dar definiciones de lo que no es porque eso elimina la novela, el ensayo, la poesía, el tratado de filosofía, es estudio médico, el manual de instrucciones... pero no ayuda. Como sí ayuda este libro.
Este libro es un montón de frases, pensamientos y mensajes positivos, dibujados o con distintas grafías. Transmite energía positiva, nos hace asentir y nos recuerda ideas que ya conocemos, pero que hace falta que saquemos del olvido al que las ha desterrado la vida "seria".
No es para leer de un tirón, sino una página, dos, cuatro, de un capítulo o de otro, el que nos diga algo. Dependiendo del día o del momento vital nos llegará más una frase u otra. Para hojear, como las citas de un almanaque.
Es divertido este manual para ser feliz.

domingo, 3 de noviembre de 2013

La elegancia del erizo, de Muriel Barbery.

En la calle Grenelle nº 7, una comunidad de vecinos de alto nivel económico (empresarios, políticos, críticos gastronómicos...), vive una portera que no es lo que parece. Lejos del estereotipo de su profesión, Renée es culta, sensible e inteligente. Como Paloma, la niña de doce años qu ese quiere suicidar, intelectualmente superdotada. La llegada del señor Ozú, un japonés libre de convencionalismos, supondrá un cataclismo en sus vidas y en la de una comunidad que ha vivido sin cambios durante veintisiete años.

Que Renée y Paloma sean las más lúcidas no las exime de tener sus propios prejuicios y soberbia, lo que las evita convertirse en personajes maniqueos. Se retrata muy bien la hipocresía burguesa, la falta de comunicación en la familia, la superficialidad de los simples y cómo la felicidad no viene de la mano del dinero, sino de los pequeños detalles, de gestos, de libros y de la sinceridad.

Más allá de las anécdotas que narra el libro, están una serie de reflexiones que hacen pensar. Quizá haya un exceso de filosofía (para retratar a Renée no hace falta profundizar en la fenomenología de Husserl), pero la autora necesitaba demostrar lo que sabía. Todo el libro está trufado de pensamientos que dan consistencia a la historia y permite su relectura.